01 May UN ESTUDIO MUESTRA QUE EL CRIBADO RUTINARIO DE SARS-CoV-2 ANTES DEL PARTO IDENTIFICA UN ALTO NÚMERO DE MUJERES ASINTOMÁTICAS.
UN ESTUDIO MUESTRA QUE EL CRIBADO RUTINARIO DE SARS-CoV-2 ANTES DEL PARTO IDENTIFICA UN ALTO NÚMERO DE MUJERES ASINTOMÁTICAS.
En un estudio en el que se realizó un cribado rutinario a todas las mujeres embarazadas ingresadas para la atención del parto, se detectó la infección por el coronavirus SARS-CoV-2 en el 16% de las mujeres, pero la mayoría (ocho de cada 10) eran asintomáticas.
15 de Abril de 2020
El cribado del SARS-CoV-2 a todas las mujeres embarazadas que ingresan al hospital para ser asistidas al parto es una medida preventiva que permite gestionar correctamente el ingreso
Se han publicado los resultados de un estudio realizado en dos centros estadounidenses, en el que se realizó un cribado sistemático de la infección COVID-19 a todas las mujeres embarazadas ingresadas para dar a luz durante dos semanas de marzo y abril de 2020 [1]. En total se incluyeron 215 mujeres a las que se les extrajeron muestras nasofaríngeas y se les realizó una prueba cuantitativa de reacción en cadena de la polimerasa (PCR) para detectar la infección por SARS-CoV-2. También se recogió la presencia de síntomas.
Entre las mujeres que participaron en el estudio, solamente cuatro (1.9%) tenían fiebre u otros síntomas de COVID-19 en el momento del ingreso y todas obtuvieron un resultado positivo en la PCR. Fue notable el número de mujeres con un resultado positivo en la prueba PCR entre las mujeres que no tenían síntomas (29 de 211, el 13.7% de participantes), representando un 88% del total de las mujeres con una prueba positiva para SARS-CoV-2. Tres de las mujeres con una prueba positiva para SARS-CoV-2 desarrollaron fiebre antes del postparto, dos de ellas recibieron antibióticos por sospecha de endometritis y en la tercera se asoció la fiebre a la COVID-19. Una mujer con una prueba inicial negativa dio positivo tras tres días de participar en el estudio. Los resultados de esta serie muestran, por tanto, que de un 16% de las mujeres ingresadas para dar a luz que presentaban la infección por el coronavirus SARS-CoV-2, la mayoría eran asintomáticas.
La decisión de realizar un cribado rutinario del SARS-CoV-2 a las mujeres embarazadas que ingresan en el hospital para ser asistidas al parto permite evaluar la aplicación de medidas de precaución y aislamiento y distribuir las camas durante el ingreso hospitalario, los cuidados neonatales y guiar al personal sanitario para el uso adecuados de equipos de protección individual.
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